viernes, 4 de julio de 2008

Bouquet de galletas decoradas


He estado bastante ocupada, recién me gradué de Chef en Panadería Europea, con esto ya cubro las tres áreas básicas: Repostería, Pastelería y Panadería. Como complemento haré Chocolatería.

Mientras tanto les muestro cómo quedaron las galletas.

lunes, 9 de junio de 2008

Galletas decoradas

















Ayer hice galletas para decorar con motivo del cumpleaños del hijo de una amiga.
Por el momento se las presento sin decorar, después les muestro el resultado final.
Mientras tanto, la receta:

Ingredientes:
2 1/2 panelita de margarina sin sal
1 Taza de azúcar
1 huevo
1 cucharadita de vainilla
3 Tazas de harina todo uso
1 Clara de huevo
Palillos

Procedimiento:
1) Batir la margarina con el azúcar.
2) Agregar el huevo y la vainilla, mezclando muy bien.
3) Por último agregar poco a poco la harina e ir mezclando hasta formar una masa que no se pegue de los dedos.
4) Tomar porciones de la masa y estirar sobre la mesa (previamente espolvoreada con un poquito de harina).
5) Al estirar la masa, debe dejarla un poco gruesa (más o menos 1 centímetro) y darle forma usando un cortador de galletas.
6) Pasar el palillo por la clara de huevo e introducirlo por el borde de la galleta.
7) Colocar las galletas en una bandeja cubierta con un Silpat o con papel encerado.
8) Hornear por 10 minutos o hasta que los bordes de las galletas tome un color dorado.
9) Colocar las galletas sobre una rejilla para que se enfríen.
10) Decorar con cubierta o glass al gusto.
En una próxima entrega les muestro como quedan las galletas decoradas.

Torta de Cotoperí






jueves, 5 de junio de 2008

Tortas: Masa Básica - Bizcocho (Prueba 2)








Esta es otra prueba de masa básica de torta o bizcocho.

Ingredientes:
300gr Margarina
2 Tazas de azúcar
7 Huevos
500gr Harina de trigo
2 cucharaditas de polvo de hornear
1 1/2 Taza de leche
Esencia de vainilla al gusto (yo le puse 1 cucharada)
Ralladura de limón (opcional)

Procedimiento:
1) Precalentar el horno a 350ºF
2) Cremar la margarina y el azúcar hasta que tome un color pálido.
3) Agregar los huevos enteros uno a uno y batir bien después de cada adición.
4) Añadir la vainilla y ralladura de limón.
5)Cernir la harina con el polvo de hornear y agregar a la mezcla anterior alternando con la leche.
6) Batir (no mucho) hasta que se hayan incorporado todos los ingredientes.
7) Colocar en un molde previamente enmatequillado y enharinado.
8) Hornear por una hora o hasta que al introducir un palillo este salga limpio.
9) Sacar del horno y colocar sobre una rejilla para que se enfríe.

Comentarios:
La mezcla quedó un poco más aguada que la Prueba 1 y la miga, después de horneada, quedó más suelta, más esponjosa.
No la rellené porque no me dio tiempo, además que mi hermano se la quiso comer así solita sin cubierta ni relleno.
Torta de Cotoperí

viernes, 30 de mayo de 2008

Mis tortas


Aquí les muestro una de mis tortas.

Más adelante les iré mostrando otras que he hecho para diferentes ocasiones.


Torta de Cotoperí

jueves, 29 de mayo de 2008

Tortas: Masa Básica - Bizcocho (Prueba 1)






He asistido a diferentes cursos de Repostería y en cada uno de ellos he visto que cada repostera tiene su receta básica de bizcocho.
Las he puesto todas en una sola página para comparar y no difieren mucho una de la otra, pero me pareció interesante saber cómo quedaba cada una.
Los ingredientes son los mismos:

Margarina sin sal
Azúcar
Huevos
Esencia de vainilla
Harina
Polvo de Hornear
Leche (líquida)

Los variantes son: Pizca de sal, ralladura de limón o naranja y las cantidades de azúcar, harina, huevos o leche.
Poco a poco les mostraré las pruebas realizadas de todas esas recetas y las características que he observado en la elaboración y en el resultado final.
Mientras tanto, aquí les muestro las fotos de la primera prueba.
Como esta es la primera vez que pongo fotos en un blog, primero les voy a poner la receta y luego las fotos.

Receta 1:
300 gr margarina sin sal (= 3 panelitas)
2 Tazas de azúcar
6 Huevos (separar claras y yemas)
3 Tazas de Harina
3 cucharaditas de polvo de hornear
1 Taza de leche
1 cucharada de esencia de vainilla

Procedimiento:
1) Precalentar el horno a 350ºF.
2) Batir la margarina hasta que tome un color pálido.
3) Agregar el azúcar y seguir batiendo hasta que duplique su volumen.
4) Añadir la vainilla y las yemas de huevo una a una, batiendo bien cada vez que las vaya agregando.
5) Cernir la harina con el polvo de hornear.
6) Agregar la harina a la mezcla de margarina, alternando con la leche.
7) Batir por 1 minuto o hasta que se integren todos los ingredientes. (Recuerde no batir en exceso).
8) Aparte, batir las claras a punto de nieve e incorpórelas a la mezcla anterior en forma envolvente. Esto le proporciona aire al batido y permitirá que la torta quede esponjosa.
9) Colocar la mezcla en un molde para tortas, previamente enmatequillado y enharinado.
10) Hornear por 1 hora.
11) Desmoldar la torta sobre una rejilla para que se enfríe.
12) Rellenar y decorar al gusto.
La textura de la torta o bizcocho es esponjosa aunque la miga se observa un poco compacta.
De sabor está muy bien y rellena mejor aún.
Pruebenla y me dan sus comentarios.
Torta de Cotoperí

miércoles, 28 de mayo de 2008

¿Por qué Cotoperí?

El cotoperí es una riquísma fruta que comí muchas veces cuando visitaba a mi abuela en las vacaciones escolares.
Se parece al mamón por su forma redonda y de gajos, pero su concha es de color amarillo y adentro tiene una semilla recubierta con una pulpa muy dulce y olor que invita a comerla.
Sé que se hace dulce de mamón (muy sabroso por cierto), pero nunca he oído sobre un dulce de cotoperí, así que mucho menos una torta; es por eso que mi blog se llama Torta de Cotoperí, porque es algo que no he visto ni probado antes.
He investigado por internet y sólo se menciona el nombre científico y que está en extinción. Tampoco hay fotos, así que empecé a preguntar dónde puedo conseguirlo para hacer pruebas, especialmente ahora que he aprendido técnicas de Pastelería y Repostería.
Ya me dijeron que hay un señor que vende los gajos en una plaza de Valle de la Pascua, Estado Guárico, así que voy a ver cómo hago para comprarlos y sembrarlos para que se multipliquen, no podemos perderlos y menos ahora que hay que cuidar con cariño a nuestro planeta.
Se preguntarán por qué no los tomo de la mata en casa de mi abuela, bueno porque ella se mudó de allí y los nuevos dueños la cortaron. Qué lástima, no saben de lo que se perdieron.
Cuando los compre, les tomo la foto y se los muestro.

martes, 27 de mayo de 2008

Un poquito de Historia

La Repostería es una parte importante de nuestra cultura gastronómica. Desde la temprana Edad media representa el irresistible placer por lo superfluo. Las representaciones del reino de la Utopía, centrados en los manjares exquisitos, incluyen que los caminos estén empedrados de panes de especias.
En los días de las fiestas y en las celebraciones había dulces en las casas de los ricos y los pobres. Y se servían cuando se había saciado el hambre. Se tomaban porque apetecían, no para calmar un estómago hambriento.
Desde entonces las cosas han cambiado un poco. La gran batalla de tartas y comer hasta la saciedad pasteles y bizcochos constituyen todavía una de las visiones preferidas de los golosos que tienen que ir calculando calorías.
La Repostería es al mismo tiempo un espectáculo para la vista y un festín para el paladar. La misma acción de cocinar, batir y dar forma no es pura obligación. ¡La Repostería es amor!
En cualquier caso no es un arte nuevo. Los egipcios, los griegos y los romanos hicieron dulces con harina, frutas, miel y especias y dieron a conocer sus recetas.
Las mujeres de Centroeuropa ofrecían a los dioses bollos trenzados en lugar de sus propias trenzas.
Del bollo de Navidad existe documentación escrita del año 1329 y la primera referencia del pan de Navidad de Dresde es de 1528.
La tradición de la Repostería doméstica que hoy conocemos se remonta al siglo XVIII. Fue entonces cuando los molineros aprendieron a obtener una harina fina de trigo sin mezcla de salvado.
La harina blanca hizo posible toda una variedad, absolutamente inédita, de productos de repostería. Fue entonces cuando comenzaron a circular los primeros bollos de Navidad.
En bodas, bautizos y otras celebraciones familiares las mujeres servían tartas rellenas de nata, confitura, mazapán y fruta.
Empezaron a batirse separadamente la clara y la yema y se introdujo en el horno la primera tarta parecida al bizcocho. Por aquellas fechas apareció la famosa tarta Linz de pastaflora.
Las primeras recetas de merengues proceden de la primera mitad del siglo XVIII. En la primera mitad del siglo XIX se abrió una era de finísimos y sustanciosos pasteles y de tartas primorosamente decoradas.
Tras la harina blanca, el azúcar de precio razonable fue el segundo requisito determinante de la actual repostería doméstica. En efecto, hasta mediados del siglo XVIII los cristales blancos únicamente podían conseguirse a precios altísimos en las farmacias en calidad de producto estimulante.
Durante el Romanticismo la gente disfrutaba de la vida familiar y se fomentaban las reuniones de señoras para tomar café y las invitaciones no consistían en ceremoniosos menús de fiesta en torno a una larga mesa, sino, dentro de un ambiente exquisitamente burgués, en pasteles y café, chocolate o té alrededor de una mesa redonda.
En 1832 el pastelero vienés Franz Sacher creó su famosa torta de chocolate, que hasta la fecha hombres y mujeres hábiles viene imitando en sus hornos domésticos.
Por la misma fecha, el pastel de Budapest Josef Karl Dobos desarrolló una versión del bizcocho sin grasa, absolutamente nuevo en aquella época y que hoy se conoce como la torta Dobos.
(Fuente: El Gran Libro Práctico de la Repostería).

lunes, 26 de mayo de 2008

¿Cómo empezó todo...?

No recuerdo exactamente cuando empezó mi gusto por la cocina, pero debo decir que mi padre tuvo mucho que ver en esto.
De niña lo veía comprar libros (otro amor heredado de él) y entre ellos recuerdo algunos como "La Cuchara de Plata" y un Recetario de Harina PAN (que ya está muy viejito, pero que guardo como un tesoro) y de donde aprendí lo que era un majarete, una polenta y unos bollitos pelones; además de unos recetarios semanales coleccionables de una enciclopedia "Salvat".
Papá siguió comprando libros de literatura, enciclopedias con toda aquella cultura general que me rodeó en mi época de estudiante, pintura, mecánica, dibujo, etc., y por supuesto libros de cocina.
Mi mamá me enseñó a hacer mi primer intento repostero: unas panquecas las cuales hacía por las tardes después de mis tareas escolares. ¡Cómo me engordaron las benditas panquecas!
Pero si había algo que disfrutaba era ver a mi padre guiarse por un libro de recetas para hacernos la clásica torta de vainilla en cada uno de nuestros cumpleaños.
Esa hermosa química que se producía al combinar mantequilla, azúcar, huevos, harina, leche y vainilla, me ha seducido desde entonces.
En esa época (no muy lejana) también empezó mi gusto por coleccionar recetas y anotarlas en lo que tuviera a la mano, desde un cuaderno del colegio hasta en la parte de atrás de un recibo de tintorería.
Actualmente los libros de Marketing, de cocina (especialmente de Repostería y Pastelería) revistas y carpetas (full de papelitos con anotaciones de recetas) se pelean los espacios de mi biblioteca.
Con el Internet la locura por la recetas se ha reforzado debido a la infinidad de páginas del ciberespacio y me encanta porque me mantengo al día; además de ser fiel seguidora de los canales por cable especializados en el área.
Pero mi gusto por la Repostería y la Pastelería no se quedó allí y decidí aprender en forma académica todas las técnicas; así terminé graduándome como Profesional en Pastelería Francesa, además de realizar todo tipo de cursos de repostería (pintura sobre torta, escultura, modelado, etc).
Bueno, eso terminó de desatar la locura y cuanto perolito, libro, etc, etc., que veo en tiendas, buhoneros, etc., lo compro porque me puede servir para las distintas prácticas.
Me gustaría aprovechar todo ese aprendizaje para cumplir un sueño que tengo de recopilar, preparar y dar a probar esas recetas dulces de pueblo en donde las sabias manos de una mujer, y por qué no, de un hombre, han producido un rico manjar que ha pasado de generación en generación conservando ese típico sabor de las abuelas y que evocan momentos especiales en la intimidad de la familia.
Igualmente, quiero aprovechar lo aprendido para crear una guía de ayuda para novatas o no y en el que espero tocar todos los temas producto de mi investigación reposteril (no sé si la palabra existe, pero ustedes entienden a lo que me refiero).
Alguien dijo que a los sueños hay que ponerle fecha para que se conviertan en metas, que a su vez son retos de vida y que al cumplirse dejan una gran satisfacción.
Este era uno de ellos...espero ser de ayuda a todo aquel que visite este blog.
Cariños y como dicen por allí...Happy baking!!!!